Finca La Pedrita es el vino ideal para esos momentos en los que el universo decide ponerte a prueba, como cuando el repartidor llega con sushi en vez de la pizza que habías estado esperando todo el día. No era lo que pediste, no era lo que querías, y definitivamente no era lo que necesitabas. Pero, como todo buen drama, solo te queda aceptar el destino con elegancia, y una copa de Finca La Pedrita en mano, te ayudará a hacerlo.
A la vista, este vino te deja claro que está a la altura de la situación: un color rojizo brillante, como el rojo furioso de tus mejillas al darte cuenta de que te tocará comer sushi sin quererlo. Pero no te preocupes, porque este vino sabe que no todo es lo que parece, y lo que se esconde detrás de esa intensidad visual es un aroma que te hace olvidar por un segundo tu decepción. En nariz, este vino es una revelación: una intensidad que se despliega con frutas rojas y negras, especias, toques balsámicos y un fondo mineral que te dice: «Sí, esto no era lo que querías, pero vamos a darle un giro a la historia».
En boca, posee una fuerza que conquista tu paladar, como el primer mordisco que das al sushi, mientras te preguntas si realmente hubieras podido hacer otra elección. Su viveza y genialidad permanecen en el fondo, con una delicadeza que, como una buena crítica constructiva, te hace sentir mejor en medio del caos. Con un final largo y persistente, este vino te deja con la sensación de que, aunque tu noche no haya salido como esperabas, al menos el vino no te ha defraudado.
Así que, cuando la vida te entregue sushi cuando solo querías pizza, no te enojes demasiado. Llora con elegancia, bebe Finca La Pedrita y acepta que, a veces, los giros inesperados de la vida también pueden ser disfrutables… o al menos tolerables con una copa en la mano.
Bodega: Masaveu (Murua).
Zona de elaboración: La Rioja.
Denominación de origen: D.O.Ca. Rioja.
Variedades: Tempranillo y Graciano despalillados con racimos enteros de viura y malvasía.
Alcohol: 15%
Volumen: 75 cl.
Añada: 2021.
Afrutado
Especiado
Joven
Crianza
Ligero
Cuerpo
A la salida de Elciego (Álava), en dirección a Laguardia, se encuentra Murua, propiedad de la Familia Maseveu desde 1974, cuya tradición vinícola se remonta a mediados del siglo XIX.
Federico Masaveu Ripoll construyó su propia bodega en Castellar del Vallès (Barcelona), de donde es originaria la familia. Un siglo más tarde, retomaron esta vocación familiar con la compra de Bodegas Murua en 1974.
Murua se encuentra enclavada en una finca dividida en 8 pagosplantados con distintas variedades dependiendo de matices como el terruño, la orientación o la exposición solar de los racimos, para alcanzar la máxima calidad con cada tipo de uva. En total, 110 hectáreas de viñedo propio en Elciego con cepas que, en algunos casos, superan los 60 años de edad. Además, cuenta con otras parcelas en municipios vecinos como Leza o Laguardia.
Entre las diferentes variedades plantadas en los pagos de Murua, la estrella de Rioja, el Tempranillo, domina ampliamente. Las uvas autóctonas de Graciano, Mazuelo, Viura, Malvasía y Garnacha blanca completan esta lista de variedades.
Las instalaciones de la bodega fueron diseñadas para recibir y seleccionar manualmente la uva tras la vendimia, y para poder elaborar y envejecer los vinos en las mejores condiciones posibles.